Disponer de una cámara potente es una de las necesidades a las que se enfrentan los aerostatos.

Son muchas los trabajos que estos deben hacer y para los cuales se precisa de una buena cámara: detección de intrusos, seguimiento constante, protección y vigilancia de fronteras, observación de infraestructuras, luchar contra el contrabando, vigilancia de terroristas… son algunas de las aplicaciones que precisan de una cámara de imágenes.

Piensa en que todas estas actividades son de vital importancia y que todas ellas tienen un punto en común: la seguridad y esto es algo que debe primar ante todo. Por ello Controp ha diseñado Speed-A, la cámara que se adapta especialmente bien a las necesidades que tienen los aerostatos.

Partiendo de que es una cámara pequeña, de peso ligero, que permite ser instalada hasta en vehículos aéreos pequeños respetando las tan demandadas características de SWAP, esta cámara tiene un punto a favor muy grande: la posibilidad de estar operativa en misiones de 24/7, haciendo que la vigilancia sea total e ininterrumpida, una cualidad muy valorada en seguridad.

Otro punto a favor que tiene esta cámara son los sensores, tanto de imágenes térmicas como de punteros láser con precisión de posición de destino, haciendo que el control sea mucho más exhaustivo y eficaz. Por último, la calidad de la imagen es otro punto muy valorado uno que, la Speed-A, cumple con creces incluso en condiciones de baja visibilidad.

Si quieres conocer más sobre esta cámara de Controp puedes hacerlo en este enlace.

controp julio