Con una gran cantidad de puertos desplegados en todo el mundo, Gigabit Ethernet es la tecnología de red más exitosa de la historia. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo funciona? 

Con un rendimiento de Gigabit en más de 100 metros de cableado de par trenzado, es ideal para una amplia gama de aplicaciones empresariales y de redes integradas. En algunos casos, sin embargo, el rendimiento de Gigabit no es suficiente. 

Esto es debido a la aparición de nuevas aplicaciones, como podría ser la navegación autónoma de vehículos, que precisan redes más rápidas para lograr conectar una gran variedad de dispositivos de alto rendimiento. Por otra parte, la construcción de estas redes con fibra óptica puede ser costosa y es particularmente difícil en entornos que requieren conexiones resistentes.

Al ver que se precisan de necesidades extras, se ha creado enlaces de 2.5G y 5G sobre cableado de par trenzado, lo que se conoce como enlaces «multi-gigabit». Este tipo de enlaces más potentes se emplean con el fin de proporcionar mayores niveles de rendimiento. Si quieres saber más, desde Curtiss Wright han creado un whitepaper que habla sobre las propiedades de esta innovación y cómo va a superar a la tecnología que la precede en los sistemas que precisan un rendimiento superior al gigabit.

Curtiss Gigabit